Estuve postergando esta edición de #Booktuber una semana.
Sin dudas, este número es el que más me costó escribir.
¿Por qué?
Tal vez tenga que ver con el hecho de que en Argentina volvimos a la Fase 1.
Y de repente la semana parece un flashback del 2020.
Sobre todo para las mujeres profesionales (más aún si tienen niñ@s a cargo), a quienes el día se les reduce a miles de tareas incompletas. Allí donde la autocrítica se hace un festín.
En fin.
Me parece que ameritaba traer el tema de la autoexigencia y el cansancio sobre la mesa.
Cuando pensé en estos dos territorios, automáticamente busqué en mi biblioteca dos libros que abrazan, sacuden y transitan por esos lugares de total incomodidad.
El primero es una novela de una de mis escritoras favoritas, Laetitia Colombani.
Su libro se titula: “Las vencedoras” y ha sabido captar con mucha sensibilidad una de las pandemias más silenciosas de las mujeres profesionales: el desgaste crónico o burnout y las inseguridades que lo rodean.
Sé que para muchas hoy el tiempo libre puede ser un verdadero lujo, pero si tenés unos 15 minutos al día para sentarte tranquila a leer las dos historias que se entrelazan en esta novela te aseguro que vale la pena.
Y en una semana lo terminás. Promesa.
¡O antes! Porque si te sentiste reflejada hasta acá en este #Booktuber, será imposible no verse también en la historia de Solène, una de las protagonistas.
¿En el anhelo de la productividad estaremos creando un Frankenstein que se nos abalanza en forma de agotamiento crónico y depresiones?
¿Honrar el tiempo libre entre reuniones de zoom será una forma revolucionaria y silenciosa de emprender en calma?
El segundo libro que te recomiendo responde a estas preguntas:
“La sociedad del cansancio” de Byung- Chul Han me trajo otra mirada respecto al tan aclamado multitasking y me invitó a mirar más de cerca los engranajes de la sociedad del rendimiento donde estamos vos y yo.
“El agotamiento, la fatiga y la asfixia ante la sobreabundancia también son reacciones inmunológicas”, dice el autor en una de las páginas y yo sentí la necesidad de compartírtelo.
Llegando al cierre de esta edición lanzo el pedido de literatura que nos traiga un poco de luz en esta situación tan de ciencia ficción que nos toca vivir como Humanidad.
Un texto que se lea como se bebe un té de lavanda, una noche fría de Otoño.
Ojalá alguien ya lo esté escribiendo.
Espero que te encuentres bien.
Y tu familia también.
Te abrazo y acompaño desde la Patagonia,
Sofi